A menudo se toma el término branding personal como algo novedoso cuando en realidad es un concepto surgido hace ya algunas décadas. Sin embargo, en los últimos tiempos se toma como algo fundamental a la hora de desarrollar la marca personal como algo diferenciador de tu negocio o producto dado que la mayor parte del tejido empresarial lo componen PYMES.
El branding personal no tiene por qué ser un ejercicio de ego. Muy al contrario, este concepto aprovecha el talento que aún no has mostrado para potenciar tu proyecto. Con este artículo, queremos darte algunas pistas de cómo hacer más novedoso tu branding profesional basándote en lo que utilizan las grandes empresas para “ganarse” al consumidor o cliente.
Hace unos años, buscando nuevos métodos publicitarios, las grandes empresas llegaron a la conclusión de que, para vender de manera efectiva, y diferenciarse sobre sus competidores, había que conectar su producto con las emociones humanas. Es lo que se denominó Marketing H2H, es decir, de Humano a Humano.
“La transformación digital es la conexión integral de las distintas áreas de la economía y la manera en la que los players de cada sector se adaptarán a las nuevas condiciones que imperan en la economía digital”. España 4.0 el el reto de la transformación digital de la economía, Siemens.
Casi todas las grandes empresas españolas (e internacionales) ya basan sus campañas publicitarias en este concepto, por ejemplo, todos recordamos el anuncio de determinada marca de pañales sobre el sentimiento de toda madre primeriza “lo vas a hacer bien” o los anuncios publicitarios tan típicos de las fechas navideñas sobre lo importante “la familia, los amigos…” dejando el producto en un “primerísimo segundo plano” y haciéndolo partícipe de la emoción (Un ejemplo de marca especialista en este tipo de marketing es Coca-Cola).
Esto se ha acrecentado de manera exponencial con la digitalización de las empresas donde los productos H2H se viralizan de manera rápida a través de plataformas y redes sociales. Sin embargo, las PYMES españolas están a la cola de esa digitalización y, por tanto, lejos de esa viralización de su producto que tan importante es en el Marketing H2H.
¿Qué puede hacer una PYME para realizar marketing H2H y potenciar su branding corporativo?
Tan sólo hay que basarse en conceptos que, pese a ser antiguos, son totalmente vigentes a la hora de humanizar nuestro producto e intentar conectarlo con el humano que potencialmente lo recibirá, casi todos basados en la neurociencia y en cómo responde el ser humano ante determinados estímulos.
Lo primero es entender que, para que tu producto o tu marca personal sea tenido en cuenta tienes que poseer liderazgo. Esta característica es una de las manifestaciones del talento humano que reside en las personas de manera más o menos oculta. Como todo potencial no es suficiente con poseerlo, hay que desarrollarlo, pero siempre desde un punto de vista positivo.
Un buen líder posee una serie de características, como son el equilibrio emocional y la sociabilidad, la comunicación efectiva, la mirada a la realidad con una visión estratégica o la valentía y decisión que son claves en la potenciación de tu branding personal.
Por otro lado, es importante que tu producto destaque o potencie las emociones positivas en el receptor. No se trata de crear pena o nostalgia, sino de remover sentimientos positivos como la solidaridad, el amor, etc.
Por último, hay que recordar que, de nada sirve tener una comunicación efectiva y orientada a las emociones si nuestro producto no tiene una buena estructura o plan de negocio.
Para que el branding profesional sea efectivo, necesitamos que nuestro negocio sea viable, es decir, que responda a los preceptos de la metodología Lean creada por Eric Ries y basada en las teorías de Steve Blank. Estos preceptos son simples, que el proyecto sea viable y que consuman muy poco efectivo y aprovechen cada recurso al máximo. Para ello es necesario usar tres técnicas: la creación de un diseño de modelo de negocio que nos permita visualizar qué se está construyendo, el desarrollo de clientes para saber qué pasos dar a la hora de seguir construyendo y, por último, un desarrollo ágil aprovechando los recursos gratuitos y sabiendo que la fecha de lanzamiento de producto es el mismo día que se piensa en él.
Y lo fundamental, lo que nunca tienes que olvidar de cara a potenciar tu branding personal es la motivación. El neuromarketing nos muestra, desde hace mucho tiempo, que alguien hace algo porque quiere, no porque necesariamente le haga feliz. Es decir, si alguien compra tu producto es porque su parte emocional del cerebro lo desea.
“Sólo hay un medio para conseguir que alguien haga algo, que quiera hacerlo”
Dale Carnegie.
Pero no sólo eso, la motivación no está sólo en el consumidor sino también en el emisor del mensaje (ya lo dijo Dale Carnegie). Es necesario que tu proyecto cree motivación, además de investigar sobre el mercado y saber dónde situarlo. Para ello es importante que motives a tu talento, transformándolo en sentido de misión no sólo para ti, sino también para tus empleados, creando una serie de valores, cultura y visión (employer branding) que hagan que se identifiquen y que lo transmitan a los clientes.
“Fomentar la cultura de la empatía en la empresa es vital, ya que lo que desea cada persona es diferente.”
Sarah Alexander, coach ejecutivo y fundadora de Vivid Communication.
Además, el proyecto debe suponer un reto, es necesario salir de la zona de confort, buscar nuevas oportunidades y nunca conformarse con lo que ya se tiene. Y, lo más importante, hay que disponer de libertad. Si tu empresa transmite unos valores innovadores, pero interiormente no tiene flexibilidad y libertad seguramente no logre que los empleados transmitan esos valores a los clientes y, por tanto, den un valor añadido al producto que haga que conecte emocionalmente con el usuario.
Con todo ello y un poco de creatividad, tenemos las bases para realizar un buen branding personal que impulse nuestro producto y destaque nuestro talento diferenciador sobre el resto de competidores del mercado.